Buenos días, hoy hemos despertado con una fatídica noticia. Roberto Iniesta, cantante y líder de Extremoduro, ha fallecido hoy, un miércoles 10 de diciembre.
Será recordado como un icono de la música,alguien que por su poesía, letras y filosofía de vida ha tocado en los corazones de los más jóvenes y mayores. Tuve la suerte de descubrir su música hace un par de años, siempre vuelvo a su famoso discurso donde aclama que una utopía es algo imposible hasta el momento de su planificación, y donde pregunta a su audiencia si alguien tiene un plan para salvar el mundo, el cual, cuanto más imposible sea, más orgulloso estaremos de él, y que en el fracaso, también obtendremos la gloria. Fueron unas de sus tantas palabras que me marcaron, independientemente de su calidad musical, y es que Robe será eternamente reconocido como un artista de la cabeza a los pies, con letras tan rebosantes de cultura como de cierta picardía y provocación.
Ahora, Dios solo sabrá dónde se encuentra su alma, quizás en esa utopía y mundo perfecto que tanto aclamaba, pero de lo que sí soy consciente, es de todas las vidas que ha salvado y cambiado a través de sus canciones e himnos, uniendo a tantas personas de diferente etnia, religión e ideología política.
Recuerdo como si fuera ayer la primera vez que escuché su famoso disco de "la ley innata", un disco experimental que conformaba 6 canciones unidas entre sí para formar una sola. Un formato que solo grandes artistas pueden permitirse el lujo de hacer. Con letras fundidas a fuego en mi memoria como "buscando mi destino, viviendo en diferido, sin ser, ni oír, ni dar." Y haciendo referencias a grandes artistas de la literatura de nuestro país, como Lorca o Benito Pérez Galdós, pero siempre con esa voz tan icónica y esa actitud rebelde y a su vez cortés.
Esperemos que descanse esté donde esté, y si algo tengo en claro, es que tanto en el cielo como en la tierra su música siempre conformará la banda sonora de nuestros corazones y su memoria nunca será olvidada
Epílogo
La vida es galopar un camino empedrado de horas, minutos y segundos, yo más humilde soy, y solo busco que la ola que surge del último suspiro de un segundo,me transporte mecido hasta el siguiente"-Roberto Iniesta.